Hans Kung (Suiza, 1928) siempre sorprende. Teólogo y pensador poliédrico, costestario a su manera y "melómano compremetido"-como le gusta llamarse-, publicó hace poco Música y Religión (2006). Una complilación de reflexiones a la luz de la teología sobre Mozart, Wagner y Bruckner. En el capítulo sobre Mozart, Kung escribe lo siguiente a partir del célebre concierto para clarinete KV 622:
"... Podrá serle dado al hombre sensible, dispuesto a escuchar, solitario y en definitiva no tal, abrirse en aras de aquella confianza entre lo racional y suprarracional a que me refería, a fin de percibir con el oído fino en el puro resonar sin palabras, del todo interiorizado y que, sin embargo, del adagio del Concierto para Clarinete, todavía algo más en nosotros: el sonido de lo bello en su infinitud, si, el sonido de esa infinidad una que nos sobrepasa y para la cual el término "belleza" no es suficiente ¡ Cifra, pues, huellas para la trascendencia! No hay que percibirlas por la fuerza, sino que son perceptibles: ahi no hay fatalidad. Si me abro, podrá ocurrir que justamente en este acaecer musical que se expresa sin palabras sea tocado por un misterio inarticulable e inefable, podrá ser que se intuya, perciba y experimente esa experiencia avasalladora, liberadora y placentera de la música una presencia de la más profunda hondura y de la más sublime altura. Puro presente, tranquilo gozo, ventura. Para describir tal experiencia y revelación de trascendencia, el lenguaje religioso sigue necesitando la palabra "Dios", cuya esencia viene a ser -de acuerdo con Nicolás de Cusa- precisamente aquella coincidentia oppositorum que también caracteriza a la música mozartiana, esto es: la reconciliación de todos los contrarios....En mi condición de hombre ilustrado de finales de siglo XX, no es que al escuchar la música de Mozart pierda de pronto la razón del todo, sino que me veo entrar en razón entera y verdaderamente. Es más: al mimso tiempo me siento transportado -lo cual nunca sabré agradecer lo bastante a Wolfgang Amadeus Mozart, y por ello se lo deseo a todos ustedes también - a esa región de paz que sobrepasa toda razón crítica y aun teológica..." (Música y Religión, 2006)
Concierto para clarinete KV 622. Adagio
Siempre quise comentar este concierto. Nunca he podido. Me sirvo de Hans Kung para ello. Quizás, al final de este recorrido, pueda decir algo de lo que es el concierto para clarinete.
1 comentario:
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