Música Principia

“Nacido con un alma normal, le pedí otra a la música: fue el comienzo de desastres maravillosos...”. E. M. Cioran, Silogismos de la amargura.

"Por la música, misteriosa forma del tiempo". Borges, El otro poema de los dones.

viernes, 29 de enero de 2010

Más de Edward Said

Continuo la lectura y reelectura de las Elaboraciones Musicales de Edward Said. En primer capítulo, el escritor de origen palestino, advierte sobre el proceso que ha seguido la interpretación en el último siglo hablando en términos de "extrema especialización". A ese respecto Said escribe: 
De hecho, deberíamos empezar señalando que la extrema especialización de toda actividad estética en el occidente contemporáneo se ha apoderado e introducido en la interpretación musical de forma tan efectiva que ha alejado por completo al compositor del intérprete. Hoy en día no hay grandes interpretes que sean compositores influyentes de primera línea; incluso Pierre Boulez y Leonard Bernstein, por mencionar a los dos posibles excepciones más obvias, pertenecen de forma separada, aunque simultánea y por igual, a los mundos de la composición y de la interpretación, pero no son conocidos principalmente como intérpretes de su propia obra, Beethoven, Mozart, Chopin y Liszt si lo fueron. 
Pero lejos de ser una crítica a esta "especialización extrema", Said trata de ubicar la causas de tal característica de la música occidental académica en los últimos 150 años y observar el tipo de experiencia estética y artística que se observa en ella. En ese sentido, nuestro autor considera que el origen de la separación entre compositor e intérprete empezó a darse bajo tres procesos: 1) la especialización virtuosa que se le exige al intérprete a partir de la cultura romántica, 2) la práctica extensiva del arte de transcripción de obras corales, sinfónicas, dramáticas y orquestales al piano y 3) el proceso - señalado por Adorno- de especialización del oyente, esto sobre todo a partir del siglo XX. Refiriéndose a la transcripción que, sin duda, representa un esfuerzo creativo, Said considera que erosiona el arte de la composición al minimizar la riqueza de la obras originales, favoreciendo la práctica doméstica . Por ello Said encuentra que una forma de otorgarle importancia al oficio del intérprete, es el modo de encarar el arte de la interpretación a partir de una lectura contemporánea de la obra. De ahí se explica que a pesar de las lógicas comerciales, es importante lo que muchos intérpretes, a pesar de la "extrema especialización" han dado a la música en las últimas décadas. 

Nuevamente Glenn Gould aparece, al igual que Toscanini, como ejemplos de generar un arte de la interpretación sobre bases nuevas, bases que se evidencian en la música académica contemporánea (aunque eso nuevo no fuese definitivo). 
El discurso crítico de la interpretación musical actual sólo permite informar de la vida concertística mediante una partitura. Pero cuando la observamos desde las rígidas (e impuestas con igual rigidez) costumbres de la vida concertística y el periodismo hacia las incursiones más extravagantes del arte de la interpretación o de la música Rock, solo entonces podemos apreciar el ingenio y la imaginación que poseían intérpretes como Toscanini o Gould, que en primer lugar aceptaron y luego elaboraron la lógica de lo que la música clásica contemporánea les ofrecía, y lo hicieron con un poco de autorreflexión y espítitu. 
Soberbia interpretación extrema llevada al piano del gran Glenn Gould del Contrapunto 1 del Arte de la Fuga BWV 1080 de J. S. Bach.

miércoles, 27 de enero de 2010

Edward Said: consideraciones sobre Gould y las Variaciones Goldberg

Después de leer a Edward Said (1935-2003) un sentimiento doble me toma. Por un lado, la admiración que me suscita su obra, donde sensibilidad, rigor crítico, cultura e inteligencia se articulan de un modo armónico, produciendo textos que en muchos campos resultan notables. Por el otro, cierta orfandad ante la ausencia de intelectuales de  una formación que, bajo un concepto manido, podemos llamar "humanista". Said fue ante todo un "humanista", tanto en el aspecto educativo como en su dimensión cultural. El ser humano y su quehacer como centro de preocupación intelectual y no estructuras y sobre estructuras que desvanecen o hunden al ser humano en una maraña conceptual muchas veces ininteligible. Ciertamente leer a Said es un placer, pero al mismo tiempo una invitación a tomarse en serio el oficio de esclarecer todo aquello que nos humaniza.

Es conocida la importancia que tuvo la música como uno de los ejes de la preocupación intelectual de Edward Said. Dentro de la veintena de libros que el escritor nos legó,  en tres de ellos se plantean abiertamente temas musicales y sus relaciones con otros campos de interés. Elaboraciones Musicales de 1991, Paralelos y Paradojas de 2002 ( escrito junto a Daniel Barenboim) y Sobre el Estilo Tardío de 2009. En estos textos el escritor norteamericano de origen palestino hace gala de un enorme conocimiento de la música, tanto a niveles formales como en el ámbito de la especulación teórica de la música. Y eso se explica, como Barenboim escribía en el prólogo a la edición española de Elaboraciones Musicales, que Said fue, "en el fondo, un músico en el sentido más profundo de la palabra". Y, por lo tanto, llegó a tener un  conocimiento de la música sólo comparable al de un músico particularmente dotado. Si se me preguntase cuál sería mi paradigma de conocedor de música, digamos entre Adorno y Said, sin duda elegiría a Said. Sin desmerecer los enormes aportes de Adorno.

En el capítulo "La interpretación como elaboración extrema" de Elaboraciones Musicales, Said nos presenta un conjunto de juicios y observaciones sobre el gran pianista canadiense Glenn Gould. Sirva esta ocasión para homenajear al gran crítico y al pianista notable.

El increíble virtuosismo y la elegancia rítmica de Gould dieron lugar a un sonido que se ajustaba de forma inmejorable al objetivo de conseguir que la música compleja sonora más clara y fuera comprendida y organizada de un modo más inteligente que el sonido logrado por otros pianistas. Su primera grabación, de la Variaciones Goldberg de Bach, se llevó a cabo cuando apenas la adolescencia, pero la extraordinaria lógica contrapuntística de la obra, sus estructuras deslumbrantemente bellas y, sin embargo, rigurosas, sus geniales configuraciones de teclado fueron interpretadas por el joven músico con un estilo pianístico inaudito. Y esa es, por supuesto, la característica principal que se puede resaltar del sonido Gould...Vistos desde ahora, la apropiación directa de Bach por parte de Gould desde los inicios de su carrera puede considerarse como un principio extraordinariamente acertado, es decir, elegido estratégicamente. Si escuchamos el primer tema de las Variaciones Goldberg  tal como las grabó en 1955, el oyente quedará sobrecogido por la franqueza sin ambages del anuncio proléptico que hace del tema (como si la gigantesca obra estuviera en cierto modo oculta dentro del tema, en frágil esbozo), no sólo de las variaciones infinitamente proliferantes que Bach elaboró a partir de él, sino el estilo interpretativo maravillosamente genial de Gould, su vertiginosa impetuosidad en los momentos tranquilos, su aumento antidiomático de los rasgos precursores del piano, la intrépida forma en que salva las configuraciones y los patrones más complejos. Gould utilizó las Variaciones Goldberg como medio para distinguirse de otros concertistas debutantes (cuyo repertorio siempre era más predecible que el suyo), como si en lugar de continuar con la tradición romántica que mantenían otros intérpretes virtuosos, Gould quisiera iniciar su linaje antes que el suyo para luego avanzarlos de un salto y situarse en el presente (Elaboraciones Musicales. pp 53 y ss)
Variaciones Golberg BWV 988. Johan Sebastian Bach. Piano: Glenn Gould. Versión de 1955.









lunes, 25 de enero de 2010

Para un joven hombre

Así se le conoce al Concierto para piano número 9 en mi bemol K 271. Fue compuesto en 1777 ( tenía 21 años) para un pianista aun no determinado con claridad por los biógrafos  y es, sin duda, la primera obra maestra del gran Wolfgang. El clasicismo llega a la madurez plena. El equilibrio entre lo galante, lo diáfano y lo heroico-trágico se evidencia por primera vez como una entidad posible. En la belleza clásica y en su forma manifiesta, los extremos   son enunciados sin temor. El arte del legato como símbolo del diálogo y la continuidad.  En adelante todo será una reiterada evolución hacia las cimas clásicas del género: el 20, el 23 y el 24 de Mozart y el 4 y 5 de Beethoven. Incluso la enorme huella se verá en la paradójica experiencia romántica de Brahms, tanto en el 1 y el 2. Con este concierto, ya Mozart esta en otra categoría de músico. Piensen que todavía faltan el 13, el 17, el 18,  el 21, el 25 y el 26. Y, como decíamos más adelante, el 20, el 23 y el 24. Y sólo estamos hablando del piano.

Los movimientos de esta obra maestra son: Allegro,  Andantino,  y Rondó (Presto). .La versión que comparto es de mi admirada Mitsuko Uchida, pianista que, confieso, siempre termina siendo querida por mis alumnos. ¿Por qué sera?



Este segundo movimiento, andantino, es una  meditación  impresionante sobre la belleza y sus posibilidades. ¡ Qué grande es Mozart!



viernes, 22 de enero de 2010

Amiga talentosa: Maria Theresia Von Paradis

La ceguera temprana no fue dificultad para que María Theresia Von Paradis (1759- 1824) desarrollara una carrera musical notable, donde la fama de interprete virtuosa y cosmopolita se uniera al talento para la composición. En 1783, la prodigiosa Maria Theresia, conoció a su amigo Wolfgang Amadeus a instancias de Leopoldo, amigo de la familia de la pianista. Al parecer, la amistad fluyó con facilidad entre los jóvenes amigos. Quizás el mutuo reconocimiento de saberse superdotados para la música obró a favor de este afecto.

En 1884, Wolfgang se encuentra en Viena y María Theresia en París. Mozart le envía a la amiga la partitura del Concierto para piano 18 en si bemol K 456 para que ella lo interpretase. Hay indicios que hacen creer que la pianista amiga participó con algunas sugerencias, sobre todo para el segundo movimiento: Andante en sol menor. Si esto fue así, me los imagino compartiendo ideas sobre este concierto ante un piano.

Mientras Wolfgang enfocó su carrera en Viena, Maria Theresia se quedó en Francia pues le unía una relación de amistad con la familia real. Incluso, durante la Revolución ella se encontraba en París y, presumiblemente, fue testigo del encarcelamiento de Luis XVI y su familia. Políticamente, Von Paradis se encontraba a favor de la monarquía. Producto de esa filiación fue su cantata "Monumento Nacional" compuesta en honor a Luis XVI y estrenada en Viena en 1792 ante la presencia del emperador Leopoldo.También es probable que en términos ideológicos ambos amigos se hayan distanciado. Wolfgang no era partidario de la virulencia de la Revolución pero tampoco tenía simpatía por la aristocracia. Recordemos la difícil relación que tuvo con ésta en sus últimos años.

La obra de Maria Theresia Von Paradis prolífica. Aunque sus operas se encuentran perdidas actualmente, nos quedan algunos conciertos para piano y su célebre Siciliana. Hoy presentaremos su "Siciliana" y el segundo movimiento del concierto 18 de Mozart, toda vez que esta obra se presenta como el testimonio de la amistad entre ambos.

Siciliana. María Theresia Von Paradis. Violonchelo: Jacqueline du Pre.



Andante en sol menor. Concierto para piano 18 en si bemol K 456. W. A. Mozart. Piano. S. Richter.

miércoles, 20 de enero de 2010

Día de la vida

Acontece y nada cesa. Ni este rumor que parece inamovible. Ni esta cosa que, aparentemente, no se inmuta. Pero algo permanece, al menos en la ilusión de que principio y final son lo mismo. Retorna en la recreación estética una y otra vez para demostrar que si bien es cierto nada cesa, por lo menos todo ha volver. Acontecer circular, aun cuando en ruinas se manifiesta.


Monteverdi es enorme. Vespro della Beata Vergine, publicadas en 1610 y compuesta durante su permanencia veneciana. De este monumento, brilla sobre el mundo sonoro el Magnificat SV206/13. Y en todo su esplendor, la antífona  Gloria Patri . Sólo porque la belleza, la bondad y la verdad se asumen como un todo, se puede concebir una obra como esta. Belleza, bondad y verdad que existen más allá de la opinión o del deseo antropológico cultural. ¡Cuánto se perdió  en la vandalización de la unidad ! La desolación estética y el Legión que no sabe a dónde ir. 


El Magnificat es canto y oración mariana. Humilde María que desde la palabra humana proclama la grandeza de Dios. Aquel que congrega en si lo bueno, lo verdadero y lo bello. Porque no sólo bueno y sabio es el Señor, también es bello. Dios es profundamente y esencialmente bello. ¿Acaso no hay belleza en la bondad y en la sabiduría de Cristo? 


La belleza resucitará una y otra vez, quieran o no los científicos de la sociocultura y los periodistas.  Será vencido lo que cesa. Y principio y fin se unirán como lo simboliza el Crismón. Veré lo que amo y a los que amo nuevamente. Esa es la promesa y yo creo en la promesa que un día recapitulado Cristo nos la dio. Si no fuese por esa promesa Gloria Patri del Magnificat no sería posible. 


Antífona Gloria Patri ( en esta grabación, desde el minuto 4: 30 hasta 6: 35)- Magnificat- Vespro della Beata Vergine. Claudio Monteverdi




Partes del Magnificat:


Magnificat
Anima mea
Et exultavit
Quia respexit
Quia fecit
Et misericordia
Fecit potentiam
Deposuit, et cantano doi
Esurientes
Suscepit
Sicut locutus
Gloria Patri
Sicut erat

lunes, 18 de enero de 2010

El abrazo

El abrazo entre lo popular y lo académico ha sido una constante en la música. Más deliberada y evidente a partir del segundo y tercer romanticismo. Cuando se cuestionó la validez universal del programa clásico de la música. Había que inspirarse en el color local, en la tradición sonora del pueblo. Reivindicar el sonido forjado en la tierra ancestral. Sin embargo, lejos de ser una ruptura, el nacionalismo romántico supuso el feliz encuentro entre la tradición académica y la tradición local, el abrazo entre lo universal y lo particular. Y de esa relación surgió una experiencia que nos feliz a muchos. Ahí está la obra, en tiempos distintos, de Chopin,  Smetana, Balakirev,  Mussorgsky, Albeniz, etc, etc. 


Hacia la segunda mitad del siglo XX se empezó a concebir otro forma del abrazo entre los académico y lo popular. Pero esta vez entre un género de lo popular mediático ( como el rock and roll) y lo académico vanguardista. A este ejercicio musical se le llamó, en términos generales, Prog Rock. El esplendor del rock progresivo se dio, si mis cálculos no fallan, entre los años 1965-1975 aproximadamente. Tiempos en que la experimentación se afianzó como estética y lenguaje distintivo de una forma de componer música. Hubo de todo. Obras muy interesantes. También composiciones que a la luz de los años resultan algo pretenciosas y, por qué no, aburridas. El balance final, a mi juicio, fue positivo aunque no llegó a formarse una tradición sólida con las décadas. Sin embargo, no me extrañaría que en los años por venir el rock progresivo sea reduscubierto y, partir de él, algo nuevo se genere. Las dinámicas culturales son complejas.


Quiero compartir experiencias del abrazo. Curved Air es una banda pionera del rock prog inglés. En 1970 grabaron un su álbun debut Airconditioning. En una de las pista de este disco, el grupo progresivo realizó una intervención sonora de las Cuatro Estaciones de Vivaldi con el título: Vivaldi (whit cannons). La interpretación que les muestro  fue grabada por la televisión belga en 1972. 









Magma fue un colectivo musical francés fundado por el percusionista francés Cristian Vander en 1969. Su música inclasificable posee un personalidad muy definida. El lenguaje de experimentación vanguardista se vincula con mayor fuerza con lo popular, creando una experiencia rica en tiempo y estructuras. ¡Cuanto de Luciano Berio! Magma sigue siendo un referente de lo más logrado en términos de libertad inteligente de la música. Insertó una composición de Magma interpretada para la televisión francesa en 1973.



Banco de Mutuo Soccorso, nombre del gran grupo italiano. En 1972 grabaron el legendario álbum Darwin. ¡ Cuántas canciones de enorme calidad y de letras inspiradoras! Ese poema que es 750.000 anni fa...l'amore? o el soberbio Miserere alla storia. Todo este disco en una obra maestra. L'evoluzione, La conquista della posizione eretta, etc. Como les digo, no hay pierde.

750.000 anni fa...l'amore?. Darwin, 1972. Banco de Mutuo Soccorso.



La Conquista Della Posizione Eretta. Darwin, 1972. Banco de Mutuo Soccorso


viernes, 15 de enero de 2010

14 es el número

Hace cerca de tres años, cuando empezaba Melomanía, escribí este texto que ahora vuelvo a presentar. Sucede que ayer, después de dos años, nuevamente escuché la Sinfonía 14 Op 135 de Dimitri  Shostakovich, uno de los compositores que más admiro y,  probablemente,  el músico más interesante del siglo XX. Afortunadamente en este lapso de tiempo, he podido conocer y profundizar en la obra del gran compositor ruso. Por ello, a pesar del entusiasmo,  puedo decir que Dimitri Shostakovich es un músico notablemente importante para la historia de la música. Aquel 26 de abril de 2007 escribí lo siguiente:

Estrenada en 1969 y conocida por mi en el 2007. Pocas veces me he lamentado tanto como hoy de mi enorme ignorancia musical. Sabía quién era Shostakovich, podía reconocer la célebre sinfonía "Leningrado" y algunos de sus memorables cuartetos. Pero no era uno de mis héroes del siglo XX como Britten, Poulenc, Messiaen, Xenakis, Nono, etc. Se que los compositores que nombro se hallan en otros referentes estéticos y estilísticos, distintos a este imprescindible autor ruso. Sin embargo, después de oír y apreciar esta conmovedora obra, considero seriamente mirar con muchísima atención la vasta creación de Shostakovich.

Esta sinfonía se construye a partir de textos poéticos de Apollinaire, Garcia Lorca, Kuchelbecker y Rilke, cantados, a la "maniera" mahleriana, por una soprano y por un bajo. La atmósfera en general me resulta sombría y asfixiante. Desolación, burla mordaz, en suma, el ejercicio del dolor en su máxima expresión. Quizá las suites para violonchelo de Britten, amigo cercano de Shostakovich, poseen similar densidad y oscuridad. Sin embargo, y estas son las paradojas del arte, la sinfonía 14 es una obra, a pesar de su dolor, profundamente bella.

 ¿Cómo puede ser el dolor tan bello? El dolor no es bello. Pero bella es la forma con la que se le evidencia. El contrapunto entre la voz soprano y violonchelo en "El suicidio", con texto de Apollinaire, resulta terriblemente conmovedor. Me deja sin aliento, fascinado por las posibilidades de inspiración que pueden poseer los abismos. ¿Qué ideas manejaba Shostakovich al momento de emprender esta sinfonía? Su vida y su actitud política fue siempre muy contradictoria; dos veces se tuvo que retractar de sus convicciones libertarias en la Unión Soviética stalinista y postestalinista. El miedo al "Gulag", a la censura de los comisarios y al ostracismo cultural, pueden haber influido en sus arrepentimientos públicos. Probablemente, el dejar de componer le pareció más terrible que la falta de libertad. Hubiera sido muy difícil crear en las estepas siberianas o en un manicomio para enfermos de "individualismo burgués". Por ello optó por seguir siendo un músico del partido.

Ahora que escucho nuevamente la 14 de Shostakovich, sigo pensado en las ideas previas a la concepción de esta obra. Vislumbro, más allá de lo lúgubre, una luz que "deja siempre a la sombra vencida" (Miguel Hernández). ¿Cuál es esa? El ejercicio mismo de la creación que, a pesar de lo siniestro que pueda recrear, se evidencia por si sólo como un triunfo del espíritu. Y me reafirmo en lo creo: gracias al arte, todo aquello que en otros contextos puede parecer devastador, resulta bello y por eso mismo, esperanzador.Archivo de Melomaía
Tras este autoplagio, me gustaría compartir dos movimientos de la esta obra. El primer movimiento adagio a partir del poema De Profundis de Federico García Lorca. El texto es el que sigue: 








Los cien enamorados
duermen para siempre
bajo la tierra seca.
Andalucía tiene
largos caminos rojos.
Córdoba, olivos verdes
donde poner cien cruces,
que los recuerden.
Los cien enamorados
duermen para siempre.




Otro movimiento bellamente obrado es el cuarto, también un adagio elaborado a partir Le Suicidé de Guillaume Apollinaire. El poema es el siguiente:

Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croix
Trois grands lys poudrés d'or que le vent effarouche
Arrosés seulement quand un ciel noir les douche
Majestueux et beaux comme sceptres des rois

L'un sort de ma plaie et quand un rayon le touche
Il se dresse sanglant c'est le lys des effrois
Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croix
Trois grands lys poudrés d'or que le vent effarouche

L'autre sort de mon coeur qui souffre sur la couche
Où le rongent les vers L'autre sort de ma bouche
Sur ma tombe écartée ils se dressent tous trois
Tout seuls tout seuls et maudits comme moi je croi
Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croi.



Finalmente, la estructura de la Sinfonía 14 Op 135 es la siguiente:

  1. Adagio. De profundis (Federico García Lorca)
  2. Allegretto. Malagueña (Federico García Lorca)
  3. Allegro molto. Loreley (Guillaume Apollinaire)
  4. Adagio. Le Suicidé (Guillaume Apollinaire)
  5. Allegretto. Les Attentives I (On watch) (Guillaume Apollinaire)
  6. Adagio. Les Attentives II (Madam, look!) (Guillaume Apollinaire)
  7. Adagio. A la Santé (Guillaume Apollinaire)
  8. Allegro. Réponse des Cosaques Zaporogues au Sultan de Constantinople (Guillaume Apollinaire)
  9. Andante. O, Del'vig, Del'vig! (Wilhelm Küchelbecker)
  10. Largo. Der Tod des Dichters (Rainer Maria Rilke)
  11. Moderato. Schlußstück (Rainer Maria Rilke

miércoles, 13 de enero de 2010

Lo que hoy es glorioso

De Bach se puede esperar todo. Nada es nimio, nada sobra. Con Bach la cercanía de la gloria esta siempre presente. Basta con ojear el cualquier partitura, escuchar cualquier obra suya  para darnos cuenta que lo glorioso es hoy.  Bach abre una puerta al cielo, quizás la más grande creada por un ser humano. Bach también es un camino, una ruta por donde el alma, liberada del amanecer crepuscular, puede vislumbrar el reino de la libertad unido a los tres trascendentales. Bach es una forma de vida, oculta en el obraje pulcro para alegrarle la vida al prójimo y alabar a la mayor gloria: la Santísima Trinidad.

Lo que hoy es glorioso es el Concierto para tres claves, violines y continuo BWV 1063. Tres movimientos encierran la coronación final del ejercicio concertante. Allegro, Alla Siciliana y Allegro. Nada esta lejos del dominio del maestro. Sólo nos queda oír y contemplar la belleza del contrapunto casi en el éxtasis de lo perfecto y sorprendernos, una vez más, de qué modo un ser humano pudo llegar a esas alturas.



Concierto para tres claves, violines y continuo BWV 1063. Movimientos: Allegro, Alla siciliana y Allegro.





lunes, 11 de enero de 2010

Beethoven por Wagner

"Nunca creó el arte elevado algo más artísticamente sencillo que esa melodía inocente como una voz infantil; en cuanto percibimos ese tema, murmurando de la manera más uniforme , tocado al unísono por los bajos de la orquesta de las cuerdas, nos penetra un escalofrío sagrado...Nada iguala a la dulce intimidad hacia la que se alza esa melodía primitiva tan pura, a medida que una voz nueva se une a ella hasta que todo ornamento, todo estallido de la emoción acrecentada, se unen a ella y en ella, como si el mundo respirara, congregado en torno al dogma por fin revelado del amor más puro" (Citado por Esteban Buch. Ver: La Novena de Beethoven. Historia Política del Himno Europeo. P. 280)
A pesar de serias sospechas que tengo sobre Wagner, pienso que pocas veces se dijo algo tan certero sobre la gran sinfonía coral de la historia. Aquella frase, al hablar de la "melodía de alegría" (Freundensmelodie)como si el mundo respirara, congregado en torno al dogma por fin revelado del amor más puro, es francamente bella y acertada.

Primera sección: Presto, allegro assai (Freundensmelodie), presto, allegro assai.(1-330), del cuarto movimiento Finale de la Novena Sinfonía en re menor Op 125. Dirige: el "Emperador" Karajan

sábado, 9 de enero de 2010

Mi música

El bello inicio de El cuerpo que tu iluminas de mi  recordado Xano Romualdo: Porque eres como el sol de los ciegos, Poesía, /profunda y terrible luz que adoro diariamente. Parafraseo el primer verso y, en vez de "poesía", cambio a "música" (con el perdón de Alejandro) . El resultado es el siguiente: Porque eres como el sol de los ciegos, música, /profunda y terrible luz que adoro diariamente. Se dirá por qué no permute "ciegos" por  "sordos". Ocurre que la ceguera puede abarcar más significados que la sordera. Al menos, así pienso.

Profunda y terrible luz que adoro diariamente. Pues la experiencia de la música no sólo esta inclinada hacia el placer. Lo terrible, como experiencia, siempre esta presente en la contemplación de la luz musical. Profunda luz de forma abstracta, accesible desde el corazón y su cerebro.

Imagino de mi vida sin la música...Es como si me quitaran el aire. Sin música, sin la gran música, la existencia sería terebrosa y profundamente triste. Sin Bach, sin Mozart, sin Beethoven, sin Brahms, sin Mahler, sin Shostakovich, sin tantos otros.

Ahora la música vuelve, vuela. Y unida a la bondad, a la verdad y a la belleza, se rebela contra el reino de la indigencia, la procacidad, la vulgaridad y el gusto fácil. Mi música esta ahí siempre, me ilumina como el sol de una mañana abierta y llena de esperanza.

Adagio Affetuosso. Sonata para piano y violonchelo N. 2. en Fa mayor Op 99. du Pre y Barenboim, en grabación histórica.

viernes, 1 de enero de 2010

Melomanía 2010

Por unos días este melómano se tomará algún descanso. Además de estar en vacaciones, tengo varios discos que quisiera escuchar con mucho cuidado. Por ejemplo, me espera una audición obligatoria de varias obras de Schönberg que hace buen tiempo me están seduciendo. Asimismo, en este 2010, se conmemora los 200 años del nacimiento de dos grandes músicos del romanticismo: Chopin y Schumann. Y es importante concentrarse en  sus  obras y en la estética que les dio origen. Igualmente,  mis músicos favoritos seguirán poblando las entradas de Melomanía, obras y versiones que sigo descubriendo desde mi opción melómana por la vida.

Les confieso que espero que al final del 2010 pueda iniciar el proyecto de convertir a Melomanía en una radio web. Este es un sueño que vengo acariciando desde hace un buen tiempo. Se que no es fácil.  Debo empezar esta aventura sólo y con las limitaciones que ello implica.

Gracias por tolerar la ignorancia de este melómano. Les deseo un año 2010 lleno de esperanzas y, sobre todo, de mucha música.

Moderato. Tempo di valse. Serenata para cuerdas Op 48. P. I. Tchaikovsky. Dirige: Maxim Vengorov.