Música Principia

“Nacido con un alma normal, le pedí otra a la música: fue el comienzo de desastres maravillosos...”. E. M. Cioran, Silogismos de la amargura.

"Por la música, misteriosa forma del tiempo". Borges, El otro poema de los dones.

viernes, 21 de marzo de 2014

Wiittgenstein y la música. Digresiones


I
Wittgenstein afirmó con una claridad digna de su envergadura filosófica lo siguiente sobre la música: "Pienso a menudo que lo máximo que me gustaría conseguir sería componer una melodía...Por eso esta idea me ronda la cabeza como un ideal tan alto; porque entonces podría sintetizar mi vida, por decirlo así; y podría tenerla ahí, cristalizada" (Movimiento del pensar. Diarios). 

II
La familia Wittgenstein amaba la música. El padre del filósofo tocaba el violonchelo y la madre el violín. El hermano de Ludwig, Paul, fue un famoso pianista en la primera mitad del siglo XX. Paul Wittgenstein perdió la mano durante la Primera Guerra Mundial y fue Ravel quien compuso para este instrumentista el famoso Concierto para la mano izquierda en re mayor. Paul Wittgenstein y Ravel nunca se llegaron a poner de acuerdo cómo debía sonar esta obra.

III
"De lo que no se puede hablar es mejor callarse". Así termina su Tratactus Ludwig Wittgenstein. ¿Cesaría la música? ¿El silencio del pensar da paso a la música? ¿Hay música callada como planteó con rigor metafísico el gran Mompou? ¿La música se muere?

IV
Confiesa  Wittgenstein sobre nuestro admirado Brahms: "La música llega a un alto total con Brahms; e incluso en Brahms puedo comenzar a percibir el ruido de la maquinaria" (Conversaciones con Wittgenstein). Si así lo dice un  ser humano de la talla intelectual como Wittgenstein, hay que prestar atención. Argumentum ad verecundiam. 

Concierto para piano para la mano izquierda en re mayor de Maurice Ravel

No hay comentarios: