Todo indica que iba llegar a ser enormemente famoso. En Roma se hizo célebre ante la nobleza cultivada en música y en otras artes. Rivalizó con Alessandro Scarlatti, obtuvo el respeto de Corelli y, según se cree, intercambió conocimientos con Vivaldi. Y un día, tocando el órgano del Gesú, decide dejar toda la fama y gloria asegurada. Viaja a Sevilla con el objetivo de hacerse misionero. Pasan unos meses y parte hacia América. Se instala en el enorme virreinato de Perú, en la ciudad de Córdoba (hoy Argentina). Desde ahí compone para las misiones jesuitas ubicadas en los diversos territorios de la mayor colonia española. Música maravillosa, de una técnica pulcra, medida; extraña para ser barroca, casi vislumbrando el clasicismo. Antes de ordenarse sacerdote muere enfermo de tuberculosis. Estaba próximo a cumplir los 38 años. En Europa pasó al olvido, en América ocurrió algo similar. Pero desde hace unas décadas empieza el redescubrimiento. Todo empieza en los archivos de Moxos (hoy Bolivia) ¿Es el hermano Zipoli el mismo Zipoli que testurudadamente discutía con Scarlatti? Ahora sabemos que si. Ahora sabemos que estamos al inicio de una revelación notable.
Zipoli. Aria en Fa Mayor
Zipoli. Aria en Fa Mayor
1 comentario:
En mayo pasado viajé a las misiones chiquitanias, y pude observar el inmenso y entusiastico trabajo de Hans Roth en la restauraciones di dichas misiones. Tambien pude valorar la recuperación de las partituras de Doménico Zipolli, que me ha ayudado a completar un reportaje particular que estoy realizando de esta zona. En cuanto a esta música, adquirí la edición de 2006 editada del Festival Internacional de Musica Renacentista y barroca de Chiquitos, en la que hay solo 3 interpretaciones. Estoy intentando buscar mas música de este autor, pues la considero muy interesante
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